Amanezco con las manos
apretando nada,
algo me dice que hay que tirar por la borda
la basura que en el alma se acumula
¿es posible traer cargando
a media espalda
una valija saturada de niños muertos?
Nada tendremos que decir
cuando haya que sepultar
cualquier parte del cuerpo,
dejaremos ahí lo que tenga que quedarse
y decidiremos –como tú-,
optar por el olvido.
O iremos cada día de muertos
a dejarle flores a nuestro efisema
y beberemos aguardiente
al compás del tiempo.
Hoy, por lo pronto,
comemos pan en ocasiones,
optamos por saborear la carne del insecto
aplaudimos al imbécil
que se dice inteligente
-algunas veces se decide festejar
lo más absurdo-.
Y yo te digo que no vuelvas a mirarme
con tu instinto de noche evaporada,
ordeno que te mantengas
lo más cerca posible a la mayor distancia
haz de tu cuerpo vapor de lluvia
y decídete pronto por asesinar un niño.
...
domingo, 23 de septiembre de 2007
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2 comentarios:
Fuerte, muy fuerte, pero bien logrado. Pegador. Tiene tanta pasión que llega hasta el coraje.
Y efectivamente, cuando algo llega a cansar, hay que tirarlo porque además ocupa el espacio de las cosas nuevas.
Saludos perros.
DDL
Tengo duda con la palabra efisema: no es ENFISEMA?
No podemos pasarnos la vida cargando malestares, nostalgias y proyectos marchitos. Lo que pasó pasó y aunque duela hasta el tuétano hay que ponerle ruedas para que avance.
Y sí, muy cierto DDL, es "enfisema". Toda la razón y una disculpa.
Abrazos muy perros.
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